Ir a terapia con Elena fue una de las mejores decisiones que he podido tomar en mi vida. Estaba perdida, encerrada en un bucle del que no tenía ni la más mínima idea de cómo salir, no sabía gestionar mis emociones ni mucho menos expresarlas de la manera adecuada. Empecé a ir a terapias que me vinieron espectacularmente bien, me ayudaban a relajarme y a poder escucharme cada vez un poquito más. Hasta que por fin llegó otra vez la luz a mi vida, la alegría y el poder comunicarme de manera adecuada. Estoy súper agradecida con Elena y con su manera de ayudarme.

Cuando empecé a trabajar con ella yo me encontraba en una situación en la que no sabía cómo salir y en la que me encontraba bastante mal. Ella, con su acompañamiento y sus dinámicas (nuevas para mi) me hizo confiar desde el primer momento en ella y sentirme realmente cómoda. Con su escucha, acompañamiento y seguridad que transmite, me ha ayudado a mejorar(me) conmigo misma y a aprender a conocerme poco a poco...

La terapia con Elena fue sanadora, intensa... una potente experiencia que me ayudó a visualizar, a soltar y a empoderarme como mujer y persona. 

El trabajo con el cuerpo me hizo conectar con mi yo más profundo, encontrarme y fluir ...

Gracias siempre, Elena, tan atenta, cercana y capaz de sostener en momentos tan vulnerables, trabajar contigo supuso un antes y un después para mí.

Mi experiencia con Elena ha sido fantástica. Sientes que estás a salvo, con absoluta confianza. Puedes abrirte al máximo sin miedo a que te juzgue, ella lo hace todo con amor y desde ese amor y la confianza consigue que tu sola descubras cosas que están muy escondidas dentro de ti. Trabajamos mucho el cuerpo y el parar, eso que tanto tanto cuesta hoy en día al ritmo que vamos. Pero te hace ver lo necesario que es parar para poder ver y ser. Yo he estado en terapia más de una vez y sin duda Elena me encanta porque desde el amor todo es más fácil y se fluye más.

Desde la primera vez que llamé a Elena hasta que finalicé mi terapia me sentí muy cómoda, comprendida y acogida por ella. Llegue con miles de dudas e inseguridades de cómo sería el proceso y con cierto miedo. Pero realmente en cada sesión que tenía con Elena me hacía estar más segura de mi misma y de las decisiones que tenía que ir tomando. No es un camino fácil, pero Elena siempre ha puesto todo su cariño y su dedicación en escucharme y ayudarme a gestionar ese cúmulo de emociones que llevamos cada uno y que hacen a cada persona única, a perderle el miedo a sentir, controlar la ansiedad y sobre todo a aceptarme tal y como soy y con cariño. Siempre he agradecido tener al lado una persona como ella acompañándome y dándome siempre las mejores palabras cuando las he necesitado y enseñándome unas herramientas que me ayudan en mi día a día. Estoy muy contenta de haberte elegido en este proceso, y sin ninguna duda, lo volvería a elegir contigo.